CONTROL DE ESFÍNTERES

Estamos en primavera y se encuentra cerca la fecha de entrada al colegio de los niños/as. Por ello, es el momento ideal para quitar el pañal, tenemos unos meses hasta septiembre. Hay que afrontar con ilusión este nuevo reto que supone educar a nuestros/as hijos/as. Es un paso más en educar a nuestros hijos/as en la autonomía, que sean capaces de realizar cosas por sí solos, para ser independientes de los padres.

Normalmente los niños se encuentran preparados para el control de esfínteres entre los dos y los tres años. Como en todo, unos niños/as aprenden antes que otros/as, igual que unos niños/as hablan y caminan antes que otros/as. El control nocturno suele se produce más tarde que el diurno, incluso hasta los 4 o 5 años.

Algunas manifestaciones de que vuestros hijos/as se encuentran preparados para el control de esfínteres:

-          Permanece seco el pañal durante 2 o 3 horas seguidas.

-          Se siente incómodo con los pañales, intenta quitárselos o prefiere estar sin ellos.

-          Comienzan diciendo pis, pis… cuando ya se lo hicieron. Es un indicio muy importante porque reconocen las sensaciones en su cuerpo del acto de orinar o defecar.

-          Otro indicio es que se mantengan quietos cuando están haciendo pis o caca.

-          Expresarán su deseo de hacer pipí o caca.

Los padres y madres debemos:

- SER PACIENTES Y PERSEVERANTES

-      IR PASO A PASO

-    TENER SENTIDO DEL HUMOR

Los padres y madres no debemos:

-          TENER PRISA: cada niño madura a su ritmo.

-    AMENAZARLE, REÑIRLE, GRITARLE O CASTIGARLE… cuando no logra controlar los esfínteres.

-      RIDICULIZARLE EN PÚBLICO, ANTE SUS HERMANOS, comparándolo con otros niños más adelantados.

-      FORZARLE A USAR EL INODORO (hay niños que pueden tener miedo a caerse).

-    PONERLE DIFICULTADES INVOLUNTARIAS (ropa difícil de manejar por el niño).

PAUTAS PARA COMENZAR:

-          Crear una rutina de ir al baño cada dos horas durante los primeros quince días:

·         Nada más levantarse

·         Cuando llega del colegio

·         Después de las comidas

·         Antes de salir de casa

·         Antes de acostarse.

-          Retirar el pañal durante el día, reservarlo para la siesta y la noche.

-          Debemos estar atentos a las señales de los niños (bailoteo, tocarse el pantalón, quedarse quieto…) para llevarles al baño.

-          Se puede comenzar preguntándole: ¿Quieres que quitemos los pañales y hacer pis y caca en el orinal, ahora que ya eres más grande?

-          Cada vez que haga pis, reforzarle con algo que le guste o poner una pegatina en una tabla de refuerzos.

-          Después se le puede ir poniendo cada dos horas y media y se le reforzará cada vez que haga pipí.

-          Debemos ser cuidadosos y no mostrar desagrado ante sus errores. Simplemente les explicaremos las consecuencias desagradables de no usar el wáter: estás mojado, sucio, huele mal… Y le indicaremos que la próxima vez a papá o a mamá le gustaría que lo hiciese en el baño para que pueda seguir limpito.

-          Es importante saber que las recaídas no son fracasos. Si le ocurre no debes regañarle ni alarmarte. Quítale importancia y muéstrale tu confianza en que lo superará.

-          Confiad en él y en vuestra capacidad para enseñarle.

DEL DIURNO AL NOCTURNO:

-          Hay que ponerles a hacer pis justo antes de acostarse, intentando que no beban mucho líquido durante las horas previas.

-          Cuando haya transcurrido como mínimo una semana aproximadamente sin que se haga pis encima durante el día, ya se puede quitar el pañal durante la noche. Es importante que entre la retirada del pañal diurno y nocturno no transcurran más de 15 días.

-          Es probable que los primeros días se levante mojado, en ese caso, podemos levantarles justo antes de acostaros vosotros para que vuelvan a hacer pis.

-          UNA VEZ LOGRADO EL CONTROL DE ESFÍNTERES… Debemos hacer hincapié en las normas de uso e higiene en el cuarto de baño (aunque durante todo el proceso ya se les han ido dando pistas):

·         Subir y bajar la tapa del inodoro antes y después de su uso.

·         Orinar o defecar sin mancharse o mojarse.

·         Cortar el papel higiénico y limpiarse sin mancharse.

·         Tirar de la cadena después de hacer pis o caca.

·         Lavarse las manos antes de salir del cuarto de baño.